miércoles, 23 de julio de 2008

Ley de Fomento a la Lectura y el Libro

Tras dos años de “polémica”, el presidente Felipe Calderón promulgó la Ley de Fomento a la Lectura y el Libro, vetada por su antecesor Vicente Fox, pero advirtió que el problema crónico de la falta de lectura en México no se puede resolver por decreto.
Por eso demandó que haya un esfuerzo perseverante en la formación de las personas, en la labor de los medios de comunicación y de la escuela, tanto para transformar los hábitos de información y entretenimiento y dar una educación de calidad.
En la residencia oficial de Los Pinos, la industria editorial, escritores y autoridades celebraron éste como un día de fiesta; sin embargo, todos advirtieron que la ley por sí misma no puede transformar un panorama “complejo e inaceptable”, como el que describió la titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP), Josefina Vázquez Mota.
Los datos más recientes citados por la funcionaria indican que 30 por ciento de los mexicanos no han visitado una biblioteca en toda su vida y 40 por ciento nunca han entrado a una librería; uno de cada ocho mexicanos no ha leído un libro en su vida y 30 por ciento no lo hicieron en el año anterior.
Bibliotecas para vivienda popular
El mandatario instruyó a la titular de la SEP, que además de “revitalizar” las bibliotecas de aula, se establezca un programa que permita entregar nueva vivienda popular con una biblioteca de 15 o 20 ejemplares “fáciles de leer”, como un diccionario, guías de alimentación, una historia de México, un atlas, la Constitución, cuentos infantiles, obras de la literatura mexicana, un cancionero y alguna introducción literaria.

Como en la ceremonia ninguno de los asistentes explicó cómo se concretará la nueva ley, la prensa le preguntó algunos detalles al presidente del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, Sergio Vela, quien respondió que el precio único se mantendrá por cinco años, “pero estoy hablando de memoria. Me están tomando por sorpresa, porque los puntos específicos de plazos los tendríamos que corroborar”.
Reacción
Editores, escritores y libreros coincidieron en señalar que la promulgación de la Ley de Fomento a la Lectura y el Libro favorecerá la producción editorial, la apertura de librerías y el hábito de la lectura; sin embargo, el aspecto polémico continúa siendo el precio único que, advierten, en un principio no beneficiará al cliente, porque se va a equilibrar hacia arriba.
Algunos editores manifestaron que si bien esa medida funciona en países europeos, como Francia y Alemania, la distribución y comercialización del libro está organizada de manera diferente en México.
Los editores independientes aseguraron que la ley sólo beneficia a los grandes consorcios y calificaron el tema del precio único como una especie de traición al cliente, porque tendrá que pagar un sobreprecio. A su vez, los libreros explicaron que la nueva ley les perjudica porque el I.V.A. se va directamente al gasto. (Cultura de La Jornada).
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Por la transformación de los hábitos
Felipe Calderón destacó que resulta vital transformar los hábitos de información y entretenimiento. Por otra parte, enfatizó que “la ley reconoce la necesidad de realizar mayores esfuerzos para aumentar los puntos de venta de libros, impulsar la diversificación de títulos y promover una sana política de distribución y de comercialización”.
La secretaria de Educación Pública, Josefina Vázquez Mota, anunció para noviembre la expedición del Programa de Fomento para el Libro y la Lectura —a través del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes—, además de la instalación del Consejo Nacional de Fomento para el Libro y la Lectura, dos herramientas fundamentales dentro de la ley.La ley es una pieza clave para establecer una política de Estado, porque busca incluir los intereses compartidos por todos los ciudadanos, porque convoca al consenso de la comunidad, porque el libro, como toda manifestación de la cultura, es un bien social y, sin duda, de los más valiosos e indispensables. (Cultura de Milenio Diario).
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Publican Ley de Fomento para la Lectura
La Secretaría de Educación Pública (SEP) emitió el decreto de la Ley de Fomento para la Lectura y el Libro, que establece, entre otras cosas, el "precio único" al que se venderán los libros de una misma edición en cualquier parte del país.
La nueva norma, difundida en el Diario Oficial de la Federación, crea también el Consejo Nacional de Fomento para el Libro y la Lectura, cuyo objetivo es fortalecer este mercado y proponer incentivos para crear, producir y exportar estos materiales.
Asimismo se plantea que los textos se traduzcan a las diferentes lenguas del país, al igual que las obras de la literatura universal.
Con la nueva norma, que abroga la Ley de Fomento para la Lectura y el Libro publicada en 2000, se crea una base de datos con el precio de todos los textos, la cual estará a cargo del Consejo y disponible para consulta pública.
Para el caso de las compras de libros que haga el Estado, el precio único no se aplicará, en tanto que los vendedores podrán aplicar costos inferiores a esa tarifa cuando sean ejemplares editados o importados 18 meses atrás, antiguos o usados.
La norma entrará en vigor este viernes 25 de julio, fecha a partir de la cual se tendrán 90 días para formar el Consejo Nacional de Fomento para el Libro y la Lectura, mismo que tendrá 60 días para la expedición de su manual de operación y programa de trabajo.
En tanto que la Secretaría de Educación Pública (SEP) junto con el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, deberán formular el Programa de Fomento para el Libro y la Lectura, y publicarlo en un plazo no mayor a 120 días. (Notimex).